La casa de las dagas voladoras

Los tres personajes del triángulo amoroso.

A la izquierda, el reaccionario y despechado capitán, con la mirada de quien no acepta perder y tocado con un casco que, más allá de su función militar, simboliza la cerrazón emotiva de su manera de amar.

A la derecha, sin casco y con ensortijado pelo, el capitán viento, cazador cazado en su propia trampa tal y como refleja su mirada de asombro.

En medio, la heroína de la aventura, vértice sobre el que se sustenta en inestable equilibrio el triángulo, aparenta una pose de preparación para una inminente lucha, propia de cualquier buen arte marcial que se precie, pero en realidad está mirando fijamente los dos dedos unidos y enhiestos que representan la dualidad de un amor que está viendo perfectamente perfilado y que parece dispuesta a escindir con la espada que sostiene sobre su cabeza.